"Un lugar para la Familia"


¿A qué has venido?

16.02.2013 14:01

 

Antes de continuar quiero pedirte que leas con interés en  tu Biblia
Juan 20:1 al 18.
Todos hemos contactado o al menos hablado con algún “Niño de la calle”…Algunos de ellos  llegan diariamente a nuestro negocio ubicado en el centro de la ciudad, se hacen sentir, esperan en la puerta, con mucha paciencia insisten hasta obtener algo para comer. y luego se van, a veces alguno quiere más y se queda con insistencia hasta lograrlo… ¡tienen una necesidad!
Es una idea de como deberíamos ser nosotros. En primer lugar, saber que no tenemos nada en nosotros mismo, pero saber también donde hay lo que buscamos, lo que deseamos y necesitamos, y una vez allí insistir hasta lograrlo.
Dice La Palabra de Dios:
“Pidan y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen y se les abrirá”
Mateo. 7:7
La historia de María Magdalena la conocemos. El Señor le había sacado 7 demonios (Lucas 8:2-3) Su gratitud al Señor no tenía limites, amó con sinceridad al Señor. Era Agradecida, había recibido beneficios en su contacto con Él..
Entonces, podemos hacernos unas preguntas agudas…
<¿A qué he  venido? >… < ¿A buscar o a traer?>…     
                                           < ¿A buscar o a criticar? >
¡María fue a buscar y a encontrarse con Señor y lo logró!
 - Tú  y yo ¿A qué hemos  venido?
¿A saludar, para que te vean? ¿A hacernos sentir? ¿A contar tus logros   humanos?
¿ A ver los errores de otros? ¿ A polemizar?
¿ A buscar amor y calor entre los hermanos?
¿A oír lo que el Señor quiere decirte?...¿ A abrazarlo y no dejarlo ir?
¿A que viniste?¿A qué hemos venido hoy aquí?...
¿A ver la piedra del sepulcro?...Podemos quedarnos en la silla sentados.
¿A ver unas  vendas, un sudario y a los ángeles?...No te levantes de tu silla.
 
¿A ver el orden del culto y oír los cantos?...Podemos quedarnos tranquilos y cantar.
      ¿O vinimos a Buscar, Encontrar, Alabar y Adorar al Cristo resucitado?...                                                     
      Entonces ¡Levántate Encuéntralo, Aférrate a Él, Alábalo y Adóralo!...
 ¡Él Vive y está aquí!
 María Magdalena lo buscó, insistió,  lo encontró y se aferró a los pies de su Señor, tanto que Él tuvo que pedirle que lo soltara…y ella recibió la bendición de ser la primera en anunciar a los  discípulos, por instrucción directa, que Jesús había resucitado, "Es que se han llevado a mi Señor y no se donde le han puesto, si usted se lo llevo, dígame donde lo ha puesto y yo iré por Él…y me lo llevaré”      
                                                               
Una pregunta final: ¿A que has venido?.
 
 

 

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