"Un lugar para la Familia"


¿Eres realmente un siervo (a) de Cristo?:

10.02.2013 09:32

 

He dicho siempre que la carta de Santiago, para mí ha sido una fuente permanente de orientación…Cada vez que la leo, tengo, por una u otra razón,  que ajustar mi vida…A veces en asuntos muy profundos y personales.
 
Es interesante que Santiago (Jacobo) al escribir su carta pudo haberse identificado como el hermano del Señor…o como el líder influyente que era en la iglesia en Jerusalén... En vez de eso, en el cap. 1:1, se presenta, y así se siente como: “Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo”…en un gesto de sumisión y obediencia voluntaria al Señorío del Padre y del Hijo.                                                                     Aquí Santiago reconoce la divinidad de su hermano Jesús.
 
Ser siervo de Jesucristo es una alta dignidad y una tremenda responsabilidad. Todo verdadero creyente es un siervo del Señor…Así que la actitud de Santiago es para imitarla.                     
 
Y no debemos olvidar que el siervo no pone condiciones a su Señor,  y además en nuestro caso somos voluntarios.
Y yo pregunto: ¿No es cierto que  casi a diario le ponemos condiciones al Señor...Y así negamos su Señorío en nuestras vidas?
 
Realmente estoy negando el Señorío de Cristo en mí…             
 
>Cuando NO cumplo con responsabilidad en el ministerio que Él me dio. >Cuando por alguna excusa superficial dejo de estar presente en su casa. >Cuando no controlo mis emociones  y ellas me controlan a mí.     
>Cuando Peleo con mi cónyuge y No busco con humildad la paz entre los dos.   
>Cuando impongo mi criterio a los demás, y me niego  a sujetarme. >Cuando no reconozco mi pecado, y  no me humillo delante del Señor y de la iglesia.    
 
La pregunta es: ¿Quién es y que representa Cristo para ti hoy?...   
 
                                                                        Déjame decirte esto:    
Jesucristo es el  ¡Rey de reyes y SEÑOR de señores! …El concepto que tengas de  Él influirá sobre tu actitud para servirle. Ese concepto también va a influir en tu actitud hacia tu prójimo dentro de tu familia y en la iglesia.
 
Si es así, entonces esta realidad se traducirá en una línea de conducta y un estilo de vida diferente en ti, que le dará honra y gloria a Dios delante de la gente.     Tú decides si vale la pena servirle o no como Él lo espera.
No olvides que la recompensa es eterna.
 
 Motívate a ser “Un(a)  verdadero(a) siervo (a) del SEÑOR”   Que hace lo que Él ordena. Y le sirve con libertad y de buena voluntad. ¿LO ERES?
 
      >Cuando Critico, Murmuro, ataco. etc.
 
Santiago dice “Soy un siervo de Dios”…Muchas veces No hay en nosotros un compromiso con el Señor…Y lo tomamos a la ligera…                                                                                                                   La recomendación es que NO pierdas de vista que ¡Cristo es el Señor!...   
 
                                    ¿Quieres que tu vida cambie?...Dale a él el primer lugar en tu vida. 
                             Reconócelo, síguelo y sírvele como un verdadero siervo que ama a su Señor.
 
 

 

 

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