"Un lugar para la Familia"


“El servicio farisaico contra el verdadero”

03.02.2013 10:19

 

En el mismo sentido que hemos venido tratando el tema del Servicio al Señor, deseo compartir lo siguiente…
En su libro, >Alabanza a la disciplina<, Richard Foster señala la diferencia importante entre el servicio farisaico (un servicio hecho para justificarnos y depender de nuestra justicia) y el servicio verdadero, hecho con transparencia espiritual para Dios. 
El autor menciona nueve puntos importantes que tenemos que considerar mientras servimos en cualquier área.  La primera frase en cada punto compara los dos tipos de servicio. Lee cada uno con tu corazón dispuesto para dejar que Dios te muestre cómo es tu servicio. 
Las frases en negrillas destacan lo que uno puede hacer como entrenamiento para el verdadero servicio.
Son los siguientes:
1. El servicio farisaico se produce a través del esfuerzo humano mientras que el servicio verdadero procede de una relación con Dios.  Escucha a los impulsos de Dios mientras empiezas y depende en su fuerza para hacer el trabajo.
2. El servicio farisaico se impresiona con lo grande, mientras que al servicio verdadero le parece casi imposible distinguir el servicio pequeño del grande.  Escoge indiscriminadamente el tipo de servicio, sabiendo que a Dios solamente le importa que hagas lo que necesita ser hecho y cuando necesita ser hecho, no importa el tamaño de la tarea.
3. El servicio farisaico exige recompensas externas, mientras que el servicio verdadero se contenta con quedar escondido.  Evita hacer cosas por otros como un medio para recibir aplauso o recompensa, sabiendo que la aprobación divina es completamente suficiente.
4. El que presta el servicio farisaico se preocupa mucho por los resultados, mientras que el que presta el servicio verdadero está libre de la necesidad de calcular los resultados.  No dejes que tus expectativas te guíen en el servicio y no salgas desilusionado si los resultados de tu servicio quedan por debajo de las expectaciones.
5. El que sirve del modo farisaico escoge a quién va a servir, mientras que el verdadero siervo no discrimina en su ministerio.  Sea cuidadoso no descuidar a los humildes e indefensos a favor de los ricos y poderosos.  También, vigila no desatender a los ricos y poderosos a favor de los humildes e indefensos.
 
6. El que sirve de la manera farisaica está afectado por las disposiciones de ánimo y por los caprichos, mientras que el verdadero siervo sirve simplemente por cuanto hay una necesidad.  No dejes que tus sentimientos, que bajan y suben, determinen tus acciones.
7. El que sirve de la manera farisaica presta un servicio temporal, mientras que el servicio verdadero es un estilo de vida.  Compasión es un estilo de vida, no meramente una ayuda ocasional.
8. El que sirve farisaicamente no tiene sensibilidad, mientras que el verdadero siervo se abstiene de realizar el servicio en forma tan libre cono decida hacerlo.  Escucha con ternura y paciencia antes de actuar.  Sé sensible a las verdaderas necesidades de la gente, no te dejes llevar meramente lo que tú piensas que necesita.
9. El que sirve al estilo farisaico fractura la comunidad, mientras que el verdadero servicio edifica la comunidad.  Ten cuidado no dejar que tus “buenas obras” se conviertan en deudas en las que otros tienen que pagar recompensas.  Deja que tu esfuerzo contribuya a la unión de la comunidad.
 

 

—————

Volver